El cubismo se caracteriza por plasmar de manera simultánea un mismo objeto desde diferentes ángulosEn cierto sentido es el movimiento más significativo y transcendente de la historia de la pintura occidental desde el Renacimiento, por lo que tiene de ruptura con la estética clásica, el concepto de belleza y las nuevas formas de observar la naturaleza.
Se considera que la fecha de inicio de este movimiento fue en 1907 con el cuadro de Las señoritas de Avignon de Pablo Picasso.
La nueva estética se desliga completamente de la interpretación o la semejanza con la naturaleza, como medio de expresión de ideas. Esta desvinculación de la naturaleza se consigue a través de la descomposición de la figura en sus partes mínimas, y pintadas de forma geométrica.
El cubismo se preocupa por la representación del movimiento y por lo tanto del tiempo: de la cuarta dimensión.